Actividades de autorregulación emocional para niños

Kartoshka

Como terapeutas, nos encantan las actividades para niños que se pueden adaptar a todas las edades y niveles de habilidad.    Esta actividad puede ser tan sencilla o tan difícil como tú la hagas.    El objetivo es que tu compañero copie la posición de tu cuerpo como si se mirara en un espejo. Y de paso, ¡aprende a cooperar!
Designa a un niño como «líder» y colócalo de forma que quede frente a frente.    La líder coloca su cuerpo y pide al otro niño que imite esa posición.    Por ejemplo, el líder puede poner una mano en su cabeza y otra en su vientre.

Juego de matemáticas prodigy

Es el día del examen y las emociones están a flor de piel en el aula. Joe no ha dejado de inquietarse en toda la mañana. Se da cuenta de que su profesor está a punto de pasar el examen y entra en pánico. Se levanta de su asiento, corre por la clase y empuja los lápices de los pupitres de sus compañeros.
Como profesor, ¿qué harías? ¿Perdería la paciencia y le diría que se sentara? ¿Extraerlo de la clase? Es probable que tu instinto sea castigar a Joe. Pero está claro que es el examen lo que está alimentando su ansiedad, así que ¿es esa una razón para castigarlo?
Según la psicóloga educativa y licenciada Lori Jackson, MS, CAGS, la respuesta es un no rotundo. Jackson, junto con el profesor de necesidades especiales severas Steven Peck, M.Ed, cofundó el Modelo de Conexiones, donde desarrollan tecnologías y estrategias de enseñanza para ayudar a los estudiantes a aprender y gestionar sus emociones. Esto incluye la aplicación KidConnect Classroom, que ayuda a los estudiantes a identificar y gestionar sus emociones mientras se producen.
Mientras que la mayoría de los adultos gestionan sus sentimientos a lo largo del día dando un paseo o respirando profundamente, muchos niños no tienen esas habilidades de afrontamiento. «Esa gestión, conocida como regulación emocional, tiene lugar en lo más profundo del centro emocional de tu cerebro. Cuando funciona, puedes pasar sin problemas de un acontecimiento a otro, gestionando las diferentes emociones que surgen», explica Jackson.

Juegos de regulación emocional online

-¡Dale un propósito al juego!    Dale a tus hijos un puñado de calcetines sin combinar.    Coloca la mitad de los calcetines al principio de una carrera de obstáculos y la otra mitad al final.    Diles que busquen juntos las coincidencias. También puedes utilizar tarjetas de juegos de memoria para encontrar las coincidencias en los extremos opuestos de la carrera de obstáculos.
Pam Braley es terapeuta ocupacional desde 1997 y ha trabajado en varios entornos, como la rehabilitación de pacientes pediátricos internos y externos, la UCIN y, actualmente, en la escuela durante los últimos 8 años. Es madre de dos hermosos niños, Jack (7) y Ella (5). Pam disfruta cocinando, leyendo un buen libro, haciendo ejercicio, incluyendo paseos, yoga y entrenando con amigos. Esta cita ha viajado con Pam a cada escritorio que ha reclamado mientras era un OT y le ayuda a mantenerse centrado tanto en su carrera y como una madre.

Simon dice

La regulación emocional no es una habilidad con la que nacemos. El estado de ánimo de los niños puede oscilar como un péndulo. Ayudar a nuestros hijos a aprender a autorregularse es una de las tareas más importantes de los padres. Este artículo examinará cómo se desarrolla la autorregulación emocional y cómo podemos ayudar a nuestros hijos a adquirir esta habilidad crucial.
Un niño que no puede autorregularse y tiene rabietas constantemente pone en tensión la relación entre padres e hijos. Esto puede repercutir en el clima de todo el hogar, incluidos los hermanos o todos los que le rodean, y provocar una espiral negativa.
Lo mismo ocurre con las amistades: Los niños que no tienen la capacidad de controlar sus sentimientos o su comportamiento pueden tener más dificultades para hacer o mantener amigos. La incapacidad de autorregular las emociones puede dar lugar a rasgos como la ira, la agresividad, el retraimiento o la ansiedad.
Todo esto puede convertirse en una bola de nieve con más consecuencias negativas: Los niños que son rechazados por sus compañeros corren un mayor riesgo de abandono escolar, delincuencia, abuso de sustancias y otros problemas de conducta1. Los que son retraídos y rechazados por sus compañeros también son más propensos a sufrir acoso escolar2.