El cambio climático y la contaminación están trayendo graves consecuencias al medio ambiente que se va deteriorando. El uso de hornos incineradores fabricados con materiales de alta resistencia, puede ayudar a controlar la contaminación mientras se gestionan los residuos de manera más eficiente.
La sociedad en su mayoría está más que concienciada con la necesidad de emprender acciones que ayuden a frenar estos problemas que pueden traer consecuencias trágicas a la tierra.
Una de las formas en que se puede ayudar a cuidar del medio ambiente, es mediante una gestión responsable de los residuos.
Todos los días se tira una gran cantidad de basura generada tanto por personas particulares y familias como por empresas como resultado de sus actividades.
Muchos de esos residuos son contaminantes y perjudican el medio ambiente, por eso una de las mejores opciones a la hora de deshacernos de ellos es el uso de hornos incineradores fabricados con materiales de alta resistencia, como los proporcionados por la empresa Refractarios Teide, donde poder quemarlos con el mínimo impacto posible.
Cómo funcionan los hornos incineradores de residuos
Los residuos son quemados en estos hornos que trabajan a altas temperaturas para incinerar lo que se eche dentro y convertirlo en cenizas.
Para que esto sea posible, los hornos están fabricados con materiales refractarios, es decir, aquellos que tienen una alta resistencia a esas temperaturas para que puedan cumplir a la perfección con su función.
Los residuos incinerados en el horno se convierten en cenizas, reduciendo el volumen de los residuos en más de un 90%. Esto permite rebajar también la cantidad de residuos que se llevan a los vertederos
Beneficios de los hornos incineradores
El uso de estos hornos incineradores para reducir la cantidad de residuos en vertederos, trae consigo diferentes beneficios que les convierten en una opción válida para hacer una gestión responsable de los residuos.
Menos residuos
El uso de hornos incineradores proporciona un método eficaz para controlar la cantidad de residuos que se llevan a vertederos, reduciendo esa cantidad y evitando la necesidad de utilizar amplias zonas de terreno para su uso en vertederos, pudiendo utilizarlas para otros usos.
Acaban con gérmenes y químicos que causan daño
Como estos hornos incineradores trabajan a altas temperaturas, son ideales para deshacerse de residuos que pueden causar daño debido a su contenido en gérmenes o productos químicos.
Este es el caso de artículos relacionados con la sanidad, por lo que estos hornos son muy útiles en esta época en la que hemos pasado por una pandemia.
Se reduce la contaminación
Al incinerar los residuos se causa menos contaminación que si se dejan en vertederos, ya que en estos últimos se liberan diferentes gases de efecto invernadero y otros.
De esta manera se reduce la contaminación provocada por los desechos y se cuida el medio ambiente.
Reducción de costes en el transporte
Debido a que los hornos incineradores producen menos olor y ruido, pueden colocarse más cerca de las ciudades a diferencia de los vertederos.
Con ello se consigue ahorrar a la hora de tener que utilizar transportes especiales para llevar los residuos hasta la incineradora.
Sistema de reciclaje más eficiente
Algunos residuos tienen metales que tras la incineración siguen enteros porque necesitan de un sistema de calor más alto para que pueda fundirse.
Estos metales, al quedar expuestos, pueden ser recogidos por trabajadores para su posterior reciclaje, lo que permite reutilizarlos.
